Tag Archives: Hayan

En Hoi An, esperando a Hayan

10 Nov

ImagenTras las dos ultimas jornadas de pedaleo, en las que hicimos mas de 100 km cada dia, saliamos ayer de la preciosa ciudad imperial de Hue con la intencion de llegar a Hoi An (unos 140 km). Sorprendidos de la actividad, creiamos que el sabado era un dia de mantenimiento del hogar, gente en los tejados y podando arboles por doquier… Mira que son trabajadores estos vietnamitas, hasta los ninos arrimando el hombro!!

A los 60 km ya vimos que la empresa era imposible, un incomodo viento de cara acompanado de lluvia nos iba a obligar a acabar la aventura en Danang, unos 35 km antes de Hue.

A 33 km de Danang paramos a tomar algo y preguntamos que pasaba, todos los tejados estaban asegurados con sacos, las puertas con palos y tablas… Sorprendidos de nuestra inocencia nos dijeron STORM, YOU MUST RESERVE A HOTEL, NOW. Creyendo que la urgencia tenia que ver con la superpoblacion de hoteles y la ausencia de turistas decidimos continuar hasta Danang. Nos dijeron que debiamos coger un coche para ir por el tunel pq si no deberiamos ir por las montanas… Pensabamos que la propuesta tambien tenia que ver con la superpoblacion de autobuses y camiones varios…

Unos km antes, ya habiamos superado dos tachuelas indicadas como «puertos» y en el cartel yo vi (lo juro): Tunnel 2,4 km Mountain 3 km, asi que tras regatear un par de posibles transportes y no llegar a un acuerdo, enfilamos el puerto. Arantxa era partidaria de coger el tunel, pero yo me puse pesado y alli nos fuimos. La subida no era dura, aqui siempre indican 7 u 8% y yo diria que es menos. Un camino precioso, carretera sobre la costa sin trafico (alguna moto, que como las bicis no pueden tomar el tunel). Subiamos ufanos, satisfechos de no haber cogido un transporte. 1 km, paradita a hacer fotos, 2km, zigzag por la carretera disfrutando la soledad, 3km, esto tiene que acabar enseguida, a cualquier cosa lo llaman puerto aqui, 4km, mira ahi empieza la bajada!!, 5km, WTF!!, 6 km, queda una hora de luz y esto sigue subiendo…

La situacion era critica, oscurecia, la lluvia arreciaba… Teniamos todo lo necesario para pasar cualquier noche en la montana, pero no la noche en que entraba la madre de todas las tormentas del Mar de China, ahi, encaramados a un balcon que daba a un mar marron y con series interminables de olas que venian desde donde alcanzaba la vista.

Arantxa ya se habia bajado de la bici e iba caminando poco a poco carretera arriba, estupenda estrategia para sensibilizar a cualquier alma caritativa que pasara, y yo avanzaba todo lo rapido que podia con la esperanza de ver el final del puerto, mientras pensaba como salir de ese marron en el que nos habia metido. He de decir que tengo la mejor companera de cordada posible, ni un reproche, otra me hubiera tirado por el acantilado!!! Y ademas con razon 🙂

Lamentablemente solo pasaban motos, casi que lo mas razonable era volver sobre nuestros pasos al no saber cuanto iba a durar el puerto. Pare a esperar a Arantxa para tomar juntos una decision, paso un camion cisterna (supongo que por el tunel no pueden pasar materias peligrosas), le hice senas y nada. Un minuto despues vi acercarse un pequeno camion, era el butanero!! Aqui nos la jugabamos, le pare (supongo que me puse en el medio de la carretera) y le pregunte si iba a Danang me dijo que si. Con senas le pedi que nos llevara, interprete su duda como un si y fui a subir la bici al camion. El chofer no bajaba (llovia mucho) y yo le llamaba para que me ayudara a subir la bici. Tuvo que flipar. Arantxa nos vio y subio como Martin Farfan, en un minuto estabamos empapados en la cabina con un angel de la guarda que no nos dirigio la palabra en hora y media. Aun tengo dudas de si era la barrera idiomatica o el shock de ver a dos chancletas escalando aquello.

El puerto era un primera en toda regla, al poco de coger el camion empezaron las herraduras, y la niebla, y el firme descarnado. Incluso en el camion se nos hizo de noche antes de acabar de bajar. Hoy hemos descubierto que los franceses llamaban a este puerto «la casa de las nubes». El significado del nombre vietnamita da mas miedo aun. Esta era la frontera entre el Reino Champa y Vietnam y aqui era donde los yankees tenian uno de sus cuarteles.

Finalmente la historia tuvo final feliz, nos dejo a 10 km de Hoi An, retomamos las burras y pedaleamos espoleados por la emocion de haber salvado los muebles. Al llegar al pueblo nos sorprendio ver los hoteles llenos, el motivo era que aqui se hospedaban los habitantes de las casas que habian sido evacuadas. Eramos los unicos extranjeros en nuestro hotel, con todas las habitaciones ocupadas por familias enteras. Para los ninos ayer debio ser un dia de fiesta, correteaban alegres por los pasillos, arracimados alrededor de los ordenadores, ajenos a la que estaba cayendo mientras sus padres y abuelos pegados al televisor escuchaban las ultimas noticias, sin saber si la tormenta tocaria tierra y les haria perder todo o pasaria por el mar como un mal sueno.

Nos preparamos para lo peor, compramos algo de comer, filtramos bastante agua, dejamos las linternas a mano y el equipaje hecho por si tocaba salir corriendo.

El dia ha amanecido muy lluvioso, para cuando hemos salido de la habitacion todas las familias se habian ido, senal de que lo peor habia pasado. Nos alegramos mucho de que no haya sucedido nada, sobre todo por la gente local. No podemos negar que nuestro corazon de turistada pensaba: Como hubiera sido vivir un tifon?

Cicloturistadas

Un año de excedencia, dos corazones, muchas agujetas.

Paisajes Adolescentes

Un año de excedencia, dos corazones, muchas agujetas.